El océano regula nuestro clima y puede amortiguar significativamente los peores impactos del cambio climático, absorbiendo las emisiones de dióxido de carbono y el calor de la atmósfera inducidos por el hombre. Sin embargo, el océano nos dice que ya es suficiente: las temperaturas de la superficie del mar baten récords, el agua del mar se vuelve cada vez más ácida, los niveles de oxígeno se agotan y el nivel del mar aumenta.
Estos impactos ya no son proyecciones de cambio, sino que son reales y se sienten con urgencia. A medida que las condiciones del océano empeoran, aún no se comprenden plenamente los impactos resultantes en el medio ambiente marino, la pesca y los medios de vida.
La acción climática es vital para la salud de los océanos y los medios de vida.
Para limitar los impactos catastróficos del cambio climático para las personas y la naturaleza, es necesario que el mundo reduzca urgentemente las emisiones de gases de efecto invernadero (GEI) de acuerdo con los objetivos del Acuerdo de París. Esto requerirá reducciones de emisiones en todos los sectores y al mismo tiempo garantizar transiciones justas y desarrollar resiliencia climática.
La acción basada en los océanos puede desempeñar un papel fundamental para ayudar al mundo a evitar los peores impactos del cambio climático, cerrando la brecha de emisiones en hasta 35%, basándose en soluciones que estén listas para implementar. Reducciones de emisiones de esta magnitud equivalen a cuatro veces las emisiones anuales de los países de la Unión Europea.
Un nuevo estudio analiza el potencial de reducción de emisiones de siete subsectores basados en los océanos, entre ellos:
- Ampliar la energía renovable basada en los océanos
- Descarbonizar el transporte marítimo
- Conservar y restaurar los ecosistemas costeros y marinos.
- Utilizar alimentos bajos en carbono del océano
- Desarrollar la eliminación de dióxido de carbono marino y la captura y almacenamiento de carbono bajo el fondo marino.
- Descarbonizar el turismo basado en el océano
- Reducir el petróleo y el gas en alta mar
Los formuladores de políticas, los gobiernos y los grupos de la sociedad civil deben incluir la política oceánica en la acción climática. Las soluciones también requieren una mayor participación y coordinación entre empresas e industrias, la inclusión de comunidades y partes interesadas y un seguimiento y evaluación sólidos.
Este informe demuestra que el océano puede proporcionar soluciones viables y listas para implementar para ayudar a "corregir el rumbo" del cambio climático. Lo que se necesita ahora es acción para ofrecer estas soluciones y niveles significativos de inversión para hacerlo posible, antes de que se nos acabe el tiempo.